martes, 29 de mayo de 2012

¡MÁS, TÓCAME MÁS!


Por favor, tócame,
necesito tanto que me toques…
Tu caricia relajante y suave
expresa seguridad y amor.
No tengas temor, sólo tócame.

(Phyllis K. Davis)



Este puede ser mi último post. Voy a parir dentro de tres o cuatro días y estaré muy ocupada. Además, en la zona de cría no hay conexión de Internet. Mi familia humana me cuida y me mima. Ya no me dejan correr, solo pequeños paseos controlados, sin nadie de la manada que me moleste. Mi barriga está creciendo por momentos. Noto cómo se mueven los cachorros. Me paso el día jadeando. Y orino con frecuencia porque los cachorros me presionan la vejiga. Ya tengo ganas de que llegue el día. Por suerte mi familia pasa muchas horas conmigo y me masajean.

- “¡Más, tócame más!” –les pido con la mirada y exagerando los gemidos de placer para que no paren de tocarme.

Me gusta que me toquen. Faltan ya pocos días y un buen masaje me alivia los músculos y mejora la circulación de la sangre. Me proporciona un relax mental que disminuye el estrés, lo cual beneficia a mis cachorros, creando un ambiente uterino más sano y tranquilo. La posición que más me gusta para que me toquen es tumbada de lado.

- “¡Más, tócame más!” –insisto.

Sus manos se deslizan entre mi pelo y sus dedos resiguen y presionan mis costillas. Es un masaje “prenatal” que me da una sensación de bienestar, me calma la tensión y la fatiga física y mental, y siento un mayor vínculo afectivo con los cachorros que se mueven en mi interior. Este masaje contribuye también a una buena oxigenación y a un adecuado reparto de nutrientes por todo mi organismo y el de los cachorros.
 
 

Para que la conducta de los cachorros en el futuro sea la adecuada, hay que proporcionarles una serie de cuidados que comienzan cuando están en el útero de la madre.

Está demostrado que el estado de ánimo de la madre influye en los cachorros que está gestando. Una madre sometida a estrés, puede tener un parto difícil y parir cachorros más nerviosos. Por tanto, la futura mamá debe estar en un ambiente tranquilo durante la gestación y disponer de un lugar resguardado y con espacio suficiente para parir. Y siempre acompañada por alguien de su familia humana.

En el campo de la ciencia se acepta ya la idea de que los fetos tienen sensaciones. De alguna manera perciben las emociones de la madre. Con un gesto tan simple como tocar nuestra barriga, acariciarnos, los fetos reciben una experiencia sensorial positiva.

Dentro del útero, los fetos no se hallan totalmente aislados del medio externo. El desarrollo de las técnicas ecográficas ha permitido observar sus reacciones durante la palpación transabdominal de la madre a partir de la sexta semana de gestación. Los estudiosos humanos sostienen la hipótesis de que los fetos son sensibles a las caricias que recibimos las madres durante la gestación.
 
 

El desarrollo de la vida de un collie está dividido en 6 etapas: prenatal, neonatal, de transición, de socialización, juvenil y de madurez.

Cada periodo requiere de unas atenciones y cuidados determinados y concretos. El periodo prenatal (desde la concepción hasta el parto) es el que ahora están “viviendo” mis cachorros en mi útero. Este periodo está condicionado por la forma en que la madre vive esos dos meses. Por lo que es recomendable cuidar y acariciar a las madres gestantes con el fin de que nazcan cachorros más dóciles y con un comportamiento más equilibrado. El ambiente al que estén expuestos los fetos interviene en la conducta y puede tener un efecto duradero y persistente en la vida futura del collie. El feto de cada cachorro, protegido dentro de su mundo acuoso, siente el calor del líquido amniótico contra la piel de su cuerpecito y nota los movimientos internos del cuerpo de su madre.

No es mi caso, pero para collies primerizas es muy importante la compañía de alguna persona de confianza. La presencia y los tocamientos de la familia humana ayuda a superar estados afectivos bajos y la sensación de miedo o ansiedad ante su primer parto.

Este masaje humano, siempre realizado con cariño  sobre la hembra embarazada, además de beneficiar su salud, su equilibrio emocional y su relajación para el momento del parto, enriquece a los cachorros que han de nacer, en su desarrollo físico, sensorial y social, y desarrolla el vínculo afectivo cachorros–madre–familia humana.

 


viernes, 18 de mayo de 2012

3º ANIVERSARIO DEL BLOG


Hoy es el tercer aniversario del Blog. Se cumplen 3 años desde que mi hija LLUM inició esta andadura por la red. A pesar de la oposición de algun@s, que no creían en su viabilidad al tratarse de un blog tan monográfico, ella se atrevió con todo (osada juventud), y lo llamó “Vivencias de una collie”, con la idea de transmitir el “sentir” y el “saber” de los collies a los visitantes interesados o curiosos, con el único objetivo de informar y entretener.

Desgraciadamente LLUM se nos fue muy pronto y yo tuve que aprender rápido, como hacemos los collies, unas nociones de informática y mucho entrenamiento con mis patas delanteras para darle a la tecla adecuada del teclado y conseguir que los humanos puedan leerme desde cualquier parte del mundo. Aunque he de reconocer que yo lo retomé sin muchas expectativas Y digo sin muchas expectativas porque lo abordé como un pasatiempo sin más y  pensé que no me iba a durar tanto.

Pero el Blog sigue, después de tres años, y aunque la frecuencia de posteo es irregular, hoy por hoy me siento feliz por este pequeño rincón en internet. Ahora estoy preparando a Nina, la más joven de la manada, para que me sustituya y aporte nuevas energías. Ella es muy positiva y siempre transmite buenas vibraciones.

Sirius, siguiendo el Blog desde Perú

Han sido 3 años geniales en los que el Blog de Llum ha pasado por todos los estados de ánimo posibles, situaciones mejores, peores, graciosas, penosas, etc. Quiero daros las gracias a tod@s por pasar por aquí de vez en cuando. Sin vosotr@s, no tendría sentido nada de lo que aquí se ha tratado.

Si os interesan las estadísticas, os comento que el Blog recibe una media de 1.290 visitas al mes. En estos tres años los post más visitados han sido el de “La procesionaria del pino” (1.308 visitas), “La leishmaniosis” (1.038 visitas) y “Mujer trabajadora” (917 visitas). Por países, desde España se han efectuado 23.045 visitas, desde México 2.410, desde Argentina 2.386, desde EEUU 1.503, desde Perú 1.300, seguidos por Colombia, Chile, Venezuela, Ecuador, Alemania…



Decir también que he aprendido muchas cosas de mucha gente. Gente que no conocía absolutamente de nada, ahora son buenos amigos y amigas. Sin duda alguna, ese es el mejor premio que tengo después de todo este tiempo, al igual que el saber que el Blog sirve de ayuda a la gente que se adentra en este mundillo del collie, desconocido y olvidado por muchos.

En fin, gracias, lametones para tod@s y que seáis muy felices.





miércoles, 9 de mayo de 2012

LA PRIMERA VEZ


Hoy estaba descansando en la hierba, cuando se me ha acercado Nina y me pregunta de sopetón:

-          Kit, ¿cómo fue la primera vez?

-          La primera vez de qué.

-          Pues, eso... tu primera relación sexual.

-          Oye Nina, ¿por qué no se lo preguntas a tu madre?

-          Ya lo he hecho, pero me ha dicho que tú eres la experta en este tema. Y mi abuela Jolie también me dice que eres muy buena “estrenando” machos.

Nina está ahora en plena adolescencia y se siente impaciente y deseosa. Ya pasó su primer celo sin ningún contacto sexual y le he tenido que explicar que en casa no le van a permitir ninguna relación sexual antes de los 20 meses. Está junto a mí, delante del ordenador, y la dejo que vaya leyendo mientras escribo. Pronto será ella quien se habrá de responsabilizar del Blog.

La primera vez para mí fue a los 22 meses. El primer día no me sentía preparada y empecé rechazando al macho, al mismo tiempo que el instinto me impulsaba a él. Tan pronto le provocaba, como no le hacía caso. Ese tira y afloja del juego sexual se prolongó más de la cuenta y mi familia suspendió la monta aquel día, para reanudarla al siguiente. Pobre Nut. Esa noche la pasé charlando con mi madre Enate, cuyos consejos me han servido para siempre:

-          Si no te concentras, te pondrás nerviosa y no conseguirás la adecuada lubricación de la zona genital, lo cual dificultará la penetración…

Luego supe que hay criadores que, antes de juntar a la pareja, recortan los pelos de alrededor de la vulva de la hembra y le ponen una crema lubricante o vaselina para facilitar la penetración del macho.

-          No hay collies frígidas, sino machos torpes –me dijo mi madre esa noche.

Con el tiempo, he visto que ella tenía razón. Algunos machos se pierden con muchos preparativos y juegos sexuales, mucha excitación, pero, a la hora de la verdad, no aciertan y se cansan en los intentos.

-          Separa bien la cola y mantente firme en los cuartos traseros. No arquees la espalda, no contraigas el cuerpo, no cierres las patas. No te agaches, no te canses, aguanta más que él –me insistió mi madre.

Siempre he seguido los consejos de mi madre y me han funcionado. Por eso Jolie me dice que soy “facilitadora, muy buena con los machos inexpertos”.

Primeros diálogos amorosos (Gala y Cap, invierno 2009)

He utilizado la palabra “monta” para definir el acto de unión sexual entre un macho y una hembra, pero también se conoce con los nombres de “cruce”, “salto”, “cubrición” o “apareamiento”.

La monta suele ser el final de un ritual que se inicia con una especie de cortejo. El macho nos olfatea la vulva y nos mordisquea en el cuello. Si no estamos a punto le gruñimos e intentamos morderle. Si lo aceptamos, elevamos y ladeamos la cola, mostrándole la vulva.

Mi madre Enate me contó que algunos machos, al encontrarse con la hembra, no se entretienen en galanterías y sin más contemplaciones saltan sobre ella. Como algunos humanos: “Aquí te pillo, aquí te mato”.

Mi madre conoció a un macho dominante y egocéntrico, que sometía a la hembra y, si observaba una resistencia inaceptable a su honor varonil, hacía prevalecer su fuerza física, obligándola casi a consumar el acto por la fuerza. Y si la coqueta hembra se negaba, la mordía con violencia en la cabeza y el cuello hasta hacerle sangre.

También me contó mi madre sobre la conducta selectiva de una hembra, un caso insólito de monogamia, que se enamoró locamente de un macho. Le presentaron apuestos machos en numerosas ocasiones y no admitió nunca salto alguno, hasta que le trajeron el macho de un vecino de jardín con quien ella flirteaba durante el año a través de la verja.

Las hembras también podemos tener nuestros caprichos sexuales y nuestras predilecciones, pero lo más corriente y normal es que, si estamos “en el momento óptimo”, aceptemos el macho que nuestra familia ha seleccionado con esmero.

Si el macho no vive con la familia, habitualmente es la hembra quien se desplaza a casa del macho. Necesitamos un lugar tranquilo para entablar nuestros primeros diálogos amorosos. Jugamos, saltamos, adoptamos posturas muy significativas y después, normalmente, nos ponemos de acuerdo.

Ritual del cortejo amoroso (Gala y Cap, invierno 2009)

-          ¿Puede dolerme la primera relación? –me interrumpe Nina

-          La primera relación puede ser dolorosa, pero también las siguientes. Si no consigues superar la tensión natural de los primeros minutos, tu vagina se lubricará menos y en lugar de estar relajada y flexible, se estrechará y endurecerá. El macho sufrirá y así es difícil conseguir un coito placentero. Lo mejor es agacharte, parar, y volver con los juegos sexuales, las caricias mutuas y los mordisquitos del macho.

 
Seguramente una madre humana, le dirá a su hija adolescente ante la primera vez: hija, es muy importante estar segura de que es el momento adecuado y la persona adecuada”.

Pero esto no funciona así en los collies. Nosotras podemos decidir más o menos el momento con nuestro celo, pero no podemos escoger el macho, porque es nuestra familia humana quien lo selecciona, si procede.

Actualmente, para un collie, tener relaciones sexuales o no, obedece a criterios muy personales de la familia humana con la que convive. Y ser virgen no es ninguna enfermedad. Para la mayoría de collies LA PRIMERA VEZ no existirá nunca porque sus dueños son personas responsables y saben que no es ninguna necesidad vital, ni para el macho ni para la hembra.