“No perdamos nada de
nuestro tiempo;
quizá los hubo más
bellos,
pero este es el nuestro”
(Jean-Paul Sartre)
Tiempo muerto, tiempo gramatical, tiempo
musical, tiempo atmosférico, tiempo de reverberación, tiempo histórico, pronóstico del tiempo, tiempo solar, tiempo
sidéreo, tiempo atómico, tiempo absoluto, tiempo de prórroga, flecha del tiempo,
medición del tiempo, tiempo de descanso, tiempo, tiempo, tiempo…
“Ya no les queda tiempo ni para empatar” –exclamaba alguien que estaba viendo
un partido de fútbol de la Eurocopa. Mientras,
en la cocina, alguien preguntaba: "¿Cuánto
tiempo ha de estar el pescado en el
horno?" O aquél que quiere ahorrar tiempo
y corre peligrosamente con el coche para llegar antes a su destino de
vacaciones, cuando normalmente allí le esperan horas y horas de perder el tiempo con ganas.
Es
curioso que las personas tratáis el tiempo
como si fuera algo tangible: ganar tiempo,
perder el tiempo, dar tiempo, dejar tiempo, malgastar el tiempo
e, incluso, ahorrar tiempo.
Preciso tiempo. Necesito ese tiempo que otros dejan
abandonado, porque les sobra o ya no saben qué hacer con él (Mario Benedetti)
El
tiempo es un factor que no se valora
en su justa medida, es invariable. Haced lo que queráis, pero el día seguirá
teniendo 24 horas y los años 365 días. El tiempo
avanza inexorablemente, y cada segundo que recorre el reloj, forma ya parte del
pasado.
¿No
es una paradoja la expresión “ahorrar tiempo”? Porque las personas podéis
perderlo fácilmente, malgastarlo, basta con dejarlo correr; también darlo,
dejarlo o incluso ganarlo, porque se trata de un tiempo futuro, pero “ahorrar tiempo” es como aquel niño que
jugaba con mi amiga Swan en la playa, tratando de guardar arena entre las manos
y se le escurría por momentos.
Los
humanos sólo podéis hacer un número limitado de cosas (bueno las mujeres,
alguna más), porque el tiempo que
tenéis es finito, cada vez que escogéis una, dejáis de escoger todas las demás.
A
veces me pregunto si estáis cuerdos los humanos. Porque los collies no somos
así y tenemos una noción muy distinta del tiempo.
Como la tiene nuestra amiga Carmen, la “tibetana”: “Con algunas personas pierdes el tiempo, con otras pierdes la noción
del tiempo y con otras recuperas el tiempo perdido”
O
mi abuela Jolie, que siempre me recuerda: “El tiempo no regresa… Donde no
puedas amar, no te demores”
Yo
siento no poder daros un consejo mágico que cambie vuestras vidas, sólo pretendo
que reflexionéis un poco sobre el tiempo,
que como dice el refrán popular, es oro. Un lingote en vuestras manos cada día,
que está ahí, quizás no tanto para que lo ahorréis, sino para que lo disfrutéis.
Feliz
verano, y si tenéis tiempo, podéis reflexionar
con el Poema de los Indios Americanos, que el viejo Cap me ha pasado:
Te deseo Tiempo
No te deseo un regalo
cualquiera,
te deseo aquello que la
mayoría no tiene,
te deseo tiempo, para reír y divertirte.
Si lo usas adecuadamente
podrás obtener de él lo que quieras.
Te deseo tiempo para tu quehacer y tu pensar,
no sólo para ti mismo,
sino también para dedicárselo a los demás.
Te deseo tiempo no para apurarte y andar con
prisas,
sino para que siempre
estés contento.
Te deseo tiempo, no sólo para que transcurra,
sino para que te quede:
tiempo
para asombrarte y tiempo para tener
confianza,
y no sólo para que lo
veas en el reloj.
Te deseo tiempo para que toques las estrellas
y tiempo para crecer, para madurar. Para ser tú.
Te deseo tiempo, para tener esperanza otra vez y
para amar,
no tiene sentido añorar.
Te deseo tiempo para que te encuentres contigo
mismo,
para vivir cada día,
cada hora, cada minuto, como un regalo.
También te deseo tiempo para perdonar y aceptar.
Te deseo de corazón que
tengas tiempo,
tiempo
para la vida y para tu vida.