- Buenos días, perdona que te molestemos.
- Buenos días, ¿que habíamos quedado?
- No, no, perdona. Es que tenemos una hembra collie y la queríamos cruzar con uno de vuestros machos.
CAP y NESS han parado de repente de ladrar y se han mirado desafiantes. DIA y yo, en cambio, hemos mirado hacia la puerta abierta del coche, por si había algún niño con quien jugar. No. No había niños. Había un perro de color arena, la “novia” para Cap o Ness.
DIA me pregunta:
- ¿De qué raza es?
- No sé Dia, acaban de decir que es una collie.
- Jo, pues no lo parece.
Los humanos siguen hablando. A mi todo me parece un “sin sentido” y no entiendo nada.
- ¿Qué afijo tiene?
- No lo sabemos, aún no tenemos los papeles.
- ¿Qué edad tiene?
- 2 años, más o menos
- Y ¿aún no os han entregado el pedigree?.
- No. Nos dicen que está en trámite.
- ¿Dónde la habéis comprado?
- En una tienda de Valencia que encontramos por internet
- ¿De dónde viene? ¿Conocéis sus orígenes?
- No. Sospechamos que de algún país del este.
- ¿Sospechamos?
- Bueno, creemos que nos han engañado. De cachorro era bonita, aunque muy pequeña y enfermiza. Y ahora, de mayor, vemos que no es el “collie” que queríamos.
- ¿Por qué no os dirigisteis a un criador de la raza?
- Ya lo hicimos, pero nos habíamos de esperar. A mi mujer le entraron las prisas y compramos lo primero que encontramos. A mi ya me pareció sospechoso, cuando llamé a la tienda y me dijeron: “Ahora mismo nos acaba de llegar un furgón lleno de cachorros y creo que hay algún collie”
- A veces comprar barato, resulta caro.
- De barato nada, que pagamos 1000€ y nos hemos gastado más de 2000€ en veterinarios
- Lo siento. Y ahora ¿por qué la queréis hacer criar?
- Si la cruzamos con uno de tus machos, nos podremos quedar con un cachorro como Dios manda.
- Me parece que os equivocáis. Nuestros machos no hacen milagros. No podemos permitir este cruce.
- Te pagaremos bien la monta.
- Lo siento. Y os aconsejo que no hagáis criar nunca a vuestra hembra. No hay ninguna garantía, ni genética ni sanitaria, para los cachorros. Y por un cachorro que vosotros queréis, os arriesgáis a que los 4, 5 ó 6 restantes acaben en una protectora. No, por favor.
- Gracias. Vamonos de aquí.
Han dado un fuerte portazo y se han ido, parece que enfadados.
Mi abuelo CAP
Como no he entendido nada, después de la siesta, he ido a hablar con CAP. Él es un veterano y sabe muchas cosas.
- Cap, te has quedado sin “novia”
- Mira, Llum, mi instinto me decía que una hembra es una hembra y si encima pagan, mejor. Pero creo que nuestra familia tiene razón al no permitir este cruce. Hemos de pensar en preservar la raza y en evitar embarazos cuyos cachorros puedan ser candidatos a engrosar aún más las Protectoras.
- ¿Por qué el señor ha dicho “nos han engañado”?
- Hace ya varios años que llegan cargamentos de cachorros de perros procedentes de algunos países del Este. Llegan a nuestro país en pésimas condiciones de transporte, con enfermedades y sin saber sus orígenes. Hay muchas tiendas, algunas de renombre, que se prestan al juego y los venden como “de raza”, engañando descaradamente a las personas que los compran. La mayoría apenas tienen un mes de edad y muchos de ellos mueren o bien durante el transporte o una vez que han sido entregados a sus propietarios, aunque estas tiendas tienen prevista esta situación, por lo que siempre garantizan que si el perro enferma, se lo cambian por otro.En sus países de origen los compran por 60€ y aquí los venden por 600€, 800€, o más, como en el caso de los señores que han venido esta mañana.
- ¿Y no se puede hacer nada para evitar este tráfico de perros?.
- Ay, Llum. Este negocio mueve mucho dinero y detrás de las mafias hay muchos intereses creados. Es difícil de solucionar. Si nadie comprara estos perros, no habría venta, no habría negocio y las mafias dejarían de traficar. Como siempre, la solución está dentro de cada persona... y nosotros somos unos simples collies.