Eva y Arancha eran buenas amigas hasta hace poco tiempo. Eva trabaja en una perrera y conoció a Arancha en una manifestación, mientras recogía firmas contra el maltrato de los animales. Congeniaron y Arancha empezó a colaborar como voluntaria en la perrera donde trabaja Eva.
Arancha tiene un collie, un macho de color arena llamado Athos, que pronto cumplirá 2 años. Le contó a Eva que lo compró en una tienda y que la engañaron. No sabe sus orígenes y, con el tiempo, se ha dado cuenta que es mestizo. Pero está muy bien de salud y lo quiere con locura. Aunque Eva le ha pedido varias veces que debería castrar o esterilizar a Athos, Arancha siempre se ha negado.
Un día Arancha le dijo a Eva que quería otro collie, que su gran ilusión desde niña era tener dos collies.
- Tú sabes que en la perrera no entran collies. Puedes adoptar un border o un labrador.
- No, Eva, me lo he pensado bien y quiero otro collie.
- Por favor, Arancha, no compres, adopta alguno de la perrera.
- No, es que yo quiero un collie hijo de Athos.
- Tú estás loca. Sabes muy bien que no puedes hacer criar a Athos. Ya ves los cachorros que nos llegan con la excusa de que “quiero un descendiente de mi perro”. Tú no puedes hacer lo mismo.
- No te esfuerces, lo tengo decidido. Puse un anuncio y una chica me ha dicho que tiene una hembra arena. Sin papeles, pero muy bonita.
- No me lo puedo creer. ¿Cómo puedes caer tan bajo?
- No te preocupes, todo está controlado. Los cachorros ya los tiene colocados: uno para mí, otro para ella, el tercero para su prima y tiene hasta cuatro amigos de su hermano dispuestos a quedarse uno.
- Lo siento Arancha, pero si sigues adelante con esa camada, hasta aquí hemos llegado. Yo no puedo ser amiga tuya. Es cuestión de principios. Y no hace falta que vuelvas más por aquí. No necesitamos tu ayuda.
Cachorros de 7 semanas con su madre AMY |
Siete meses después, al abrir por la mañana la perrera, Eva se llevó la gran sorpresa. Por la noche, alguien había tirado dos perros por encima de la valla que da al patio. No era la primera vez, pero en esta ocasión los perros le eran familiares. Eran dos collies que no podían esconder sus orígenes. Sin duda eran hijos de Athos, el perro de Arancha. Su raya blanca en la cabeza los delataba.
Eva llamó por teléfono a Arancha y le pidió explicaciones.
- Yo no sé nada. Nacieron 6 cachorros y cuando tenían un mes yo fui a buscar el mío.
- ¿Y qué pasó con los otros 5?
- No he sabido nada más de la chica y no es mi problema lo que ha hecho con los otros cachorros.
- ¿Que no es tu problema? Tú ideaste y forzaste esa camada y tu macho fue protagonista.
- Sí, pero la responsable de los cachorros es la madre. A mí no me pases ese marrón.
- Serás hija de p…
Eva no pudo continuar hablando. Arancha le había colgado el teléfono. Por suerte, los dos cachorros de collie abandonados fueron adoptados enseguida.
Los mismos cachorros recibiendo la visita de su padre JOU |
La mayoría de las personas responsables, antes de adquirir un perro, se plantean lo que ello significa, tanto desde el punto de vista económico, como de las obligaciones que hay que asumir para proporcionarnos una vida digna y adecuada. Los collies no somos un objeto de consumo. Somos un ser vivo al que hay que educar, alimentar, cuidar, sacar de paseo y también establecer vínculos afectivos.
La mayoría habéis asumido que nuestra presencia os exigirá tiempo, dinero, dedicación diaria, que condicionará vuestras vacaciones y viajes, que cambiará la relación con los vecinos, los amigos y la familia y os obligará a conocer y acatar las normativas vigentes en vuestra comunidad o municipio. Pero existe otro grado más de responsabilidad que algunos humanos olvidáis fácilmente, como le ha pasado a Arancha: la PATERNIDAD RESPONSABLE.
Muchos de los perros que llegan a las perreras, refugios o protectoras, son fruto de la desidia de algunos dueños a la hora de controlar la reproducción o bien de la irresponsabilidad o capricho, como en el caso de Arancha.
Y esta falta de responsabilidad se da con mucha frecuencia en los propietarios de machos. Se publican muchos anuncios de machos que solicitan relaciones con una hembra sin pensar en las consecuencias. (Ver el post “Anuncios Frívolos”)
Normalmente se trata de personas que quieren descendencia de su macho, aún sabiendo que su collie está muy lejos del estándar de la raza. O bien, simplemente, buscan un desahogo sexual para mejorar su carácter. Graves errores que desgraciadamente perjudican a la raza y engrosan aún más las perreras.
Hay también propietarios que reciben solicitudes para cruzar con su macho, porque tienen un buen collie y, a cambio de un dinero, dicen sí a cualquier hembra, sin analizar sus orígenes. Otro error grave.
Si estás pensando en utilizar tu collie como semental, no eres menos responsable de la salud, tipicidad y carácter de la camada que el propietario de la hembra. Y el futuro de los cachorros, de todos los cachorros, también te incumbe. PATERNIDAD RESPONSABLE.
Aunque hace tiempo que leo tu blog no me había atrevido a comentar (ya conoces el dicho: si no tienes nada bueno que aportar mejor no hables...) pero después de leer esta entrada quisiera comentar que estoy totalmente de acuerdo contigo.
ResponderEliminarTener un perro bajo tu responsabilidad comporta una serie de compromisos. Y no pienso solamente en una cría responsable (que creo que solo tendrían que hacer los criadores que pueden garantizar que de la unión de dos ejemplares saldrán cachorros dentro del estándar de la raza, con buen carácter y sin problemas de salud (a ver que particular se preocupa de esto!)) sino también de hacer una búsqueda de información sobre la raza que vas a adquirir antes de tener el cachorro en casa, pues cada raza tiene unas necesidades distintas. No vale comprarse un border collie si luego no vas a proporcionarle ejercicio y estímulos, y como este mil ejemplos.
Ahora mismo estamos en proceso de ampliar la familia con una barbuda (schnauzer) y llevamos más de medio año leyendo libros, foros, blogs, ahora iremos a la expo canina de Valls a ver ejemplares de schnauzers y si con suerte los criadores tienen alguna camada programada podremos disfrutar del cachorro este año.
Uff perdón por el rollo que he soltado! Pero leer estas cosas me indignan!