miércoles, 1 de diciembre de 2010

UN COLLIE NO ES UN JUGUETE



Hoy entramos en el último mes del año y es la época en la que los humanos utilizáis con más frecuencia eso que llamáis “regalo”, sobre todo en las fiestas de Navidad y Reyes…
  
¿Quién no ha soñado alguna vez, siendo niño, con abrir alguno de los regalos de Navidad y encontrar en su interior un cachorro?
Tal vez vuestro hijo o hija, durante los próximos días, escriba a Papa Noel o a los Reyes Magos expresando su ferviente deseo de tener un collie para convertirlo en su compañero de aventuras.

Muy bonito, pero no. Sois los padres los que habéis de explicar a vuestros hijos de que un colllie no es un juguete. Un niño aún no es capaz de pensar a largo plazo, no puede darse cuenta, por más buena voluntad que tenga, de todo lo que  implica un cachorro en casa.

Un collie no es un juguete. Aunque nos gusta mucho jugar, los collies no somos juguetes. Somos un ser vivo, que necesitamos que l@s dueñ@s nos ofrezcáis cariño, ejercicio y atenciones como uno más de la familia, que deis sentido a nuestra existencia.
 

Las tiendas que se dedican a la venta de mascotas consideran que estas fechas próximas a la Navidad es un período propicio, una época ideal, para realizar muchas ventas. Se aprovechan de que los pequeños de la casa sienten una especial predilección por los animales domésticos.

Hay padres que ceden a la insistencia y terminan comprando lo que, en muchas ocasiones, es un mero capricho. Regalar una mascota es una responsabilidad e implica una profunda reflexión siempre, a lo largo de todo el año, independientemente de la época.

Muchas de las adquisiciones de animales que se realizan en esta época, son hechas de forma compulsiva, sin reflexionar sobre las obligaciones que se adquieren al hacerse cargo de la vida de un animal que depende de los cuidados y atenciones de “alguien”, tú o la persona a la que quieras sorprender.
Antes de nada, hay que pensar si el futuro propietario a quien se vaya a regalar un collie, se va a responsabilizar de él de por vida y no lo va a dejar tirado en cuanto surja un problema o se canse de su compañía. El regalo puede caer en desgracia y no ser bienvenido, ya que el receptor podría no estar dispuesto a asumir ciertas rutinas.

¿Por qué queréis regalar un collie?
En ningún caso la respuesta debería de estar enfocada a que el perro se convierta en un juguete o un atractivo regalo para alguien.

El afán consumista se codea con el espíritu navideño y puede llevaros a confusión, ya que los comercios os sirven esta opción en bandeja. Hay que evitar la compra compulsiva, lo cual no es fácil debido a que en muchos sitios exponen los cachorros en escaparates (algo a todas luces reprochable), para animar a los indecisos. 

Sed responsables. Un collie no es un juguete ni un regalo sorpresa.

Se estima que más del 30% de los animales que se regalan en Navidades son abandonados a los pocos meses.

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario